Gaspar |
UN rey "mago", Baltasar, en una ciudad del norte de España, encaramado desde el balcón del Ayuntamiento sorprendió con una afirmación que descolocó a pequeños y mayores anunciando que los reyes eran los padres.
Decidiendo por sí solo poner este rey fin a un sueño del que NADIE le autorizó despertarles. Y adoptando un dictamen confesorio que sólo a los padres, en su caso, les correspondía decidir el cuándo y el dónde.
Y en otro rincón más próximo, otro rey mago se permitió ante el asombro de todos ( e imagino que el gesto torcido de los mas peques por no entender absolutamente nada ) dirigirse a los mayores en lugar de a los niños. Hacer campaña electoral sobre programas y proyectos electorales. Aconsejar y sugerir que en las próximas elecciones no se deje el voto en blanco... cuando su invitación lo era para dar cumplimiento a las cartas rellenas de papeletas de ilusiones y escuchar consejos para esa noche de fascinación.
Y ese Melchor que aprovechó su viaje de Oriente a Occidente para" orientar" el voto ( venir de "Oriente"...no le autoriza para conjugar el verbo) ...olvidó que la orientación que debió regar desde el balcón de invitados lo fuera para cargar de magia e ilusión las esperanzas de los niños, que, boquiabiertos, nada entendieron de tan reivindicativo viaje.
Y me pregunto cómo se puede utilizar tan torticeramente el hechizo conferido para tan digno reinado por parte de Melchor y Baltasar.
Me queda la esperanza de que el Rey que siempre me acompañó y era mi elegido, Gaspar, no cometa el mismo error imperdonable que me haga sugerir su abdicación.
Confiando que este nunca acepte invitación a balcón consistorial alguno para su mitin..., o rendiré pleitesía a Papa Noel....,
Atentamente,
(Alguien que no quiere despertar a los niños de sus sueños y que protesta porque OTROS disfrazados de lo que no son, se los desvanezcan)